La vida sigue, aunque sea a muchos kilómetros de casa, y celebrar las pequeñas cosas es parte esencial de la vida.
Los cumpleaños son celebraciones que nos invitan a mirar atrás con añoranza y a mirar hacia adelante con esperanza. Seguimos cumpliendo años, y eso ya es una buena noticia. Y sobre todo lo es para las familias de un niño con cáncer o alguna otra enfermedad grave.
Afrontar un diagnóstico de cáncer infantil es muy complicado para una madre, y lo es aún más si tiene que salir corriendo de su país con su hija enferma y convertirse en refugiada por culpa de una guerra que nadie esperaba. Pero mientras hay vida, se mantiene la esperanza, y los cumpleaños son fechas que las familias ucranianas celebran con la misma ilusión que nosotros, más aún cuando se trata del cumpleaños de pequeños valientes que luchan contra el cáncer.

Las familias provenientes de Ucrania que hemos acogido en Barcelona han celebrado ya varias fiestas de cumpleaños en nuestro país. Su celebración no es muy diferente a la nuestra: los miembros de la familia y algunos amigos se reúnen para compartir un buen rato alrededor de una mesa, entre platos de comida y bebidas, y la fiesta culmina cuando la persona que cumple años sopla la llama de la vela (o de las velas) de un pastel.
El domingo 5 de julio fue el aniversario de la pequeña Liza (2 años), que sufre un tipo poco frecuente de cáncer renal. Antes fue el de Alina, hermana de Kostia, y los días 6, 7 y 8 de julio fueron los cumpleaños de Denys (4 años), Oleh (14 años) y Liza K. (10 años), también pacientes oncológicos. A ellos y a sus familias les deseamos toda la felicidad… ¡y que cumplan muchos más!

Necesitamos y necesitaremos ayuda para desplegar el operativo de acogida y alojamiento durante el tiempo que dure el tratamiento. La mejor manera de ayudarnos es a través de donativos económicos, que nos permitirán financiar recursos y materiales, según las necesidades.
Muchas gracias a todos y todas. Estamos y están en un sitio seguro y juntos somos Imparables.