Danil tiene 8 años y es de la ciudad de Kharkiv-Járkov.  Es uno de los niños enfermos de cáncer que llegó a Barcelona para reanudar su tratamiento, y lo ha podido hacer en el Hospital de Sant Pau de Barcelona.

Llegó a Barcelona con su madre Maryna y su hermano, Roman de 17 años. También les acompañaban Tatiana e Ivan, hijo de Tatiana, primo, gran amigo y compañero del Danil.

Danil e Ivan tienen ambos 8 años, son primos, pero tienen una relación muy especial, ellos dicen que son más que primos o hermanos. Están siempre juntos, lo comparten todo, y ahora han vivido juntos la enfermedad, el impacto de la guerra y la huida.

Danil e Ivan con sus madres

Las dos familias están muy unidas, vivían en el mismo edificio de la ciudad de Kharviv-Járkov, y juntas iniciaron la huida de la guerra, dejando allí a todas las personas queridas, familia, vecinos y amigos. De Kharkiv-Járkov viajaron en bus hasta Lviv, muy cerca de la frontera con Polonia. Después viajaron en tren hasta Polonia, y por último en avión hasta Barcelona. La huida duró una semana.

En el Hospital de Sant Pau, Danil ha podido reanudar el tratamiento oncológico, y está bajo control. Están alojados en un piso de la Fundación Villavecchia, muy cerca del hospital.  Se han integrado en el barrio, pueden ir a las visitas al hospital a pie, y, a menudo, se acercan también a la Fundación, para recoger ropa, material u otros tipos de ayudas.

Está contento y animado, aunque querría ir a la escuela como el resto de niños, sobre todo como su primo Ivan, que ya ha podido escolarizarse en Barcelona; para seguir viviendo toda esta aventura con Ivan, pero de momento no tiene autorización médica para ir a escuela y seguramente deberá seguir la escuela desde casa.

Su hermano, Roman, es un chico alto y risueño de 17 años, que no pudo acabar el bachillerato por causa de la guerra. Sus planes de estudiar Educación física o Informática en Ucrania se han visto truncados. Le gusta Barcelona, pero cuando le preguntamos si le gustaría estudiar en Barcelona, nos contesta que, a pesar  de sentirse a gusto en esta ciudad, tan lejos de la suya, él quiere volver a Ucrania, y retomar su vida de nuevo allí.

Si quieres colaborar con la Fundación Enriqueta Villavecchia y la Fundación Josep Carreras, puedes hacerlo a través del Dispositivo Especial de Acogida a niños oncológicos. Necesitamos más recursos para poder continuar atendiendo a estas familias.